Por cada
kilo de masa agregar 25 g de cacao en polvo, mezclando bien hasta que la pasta
adquiera un color uniforme. Luego de 10’ de descanso, se estira con la brilla
poniendo sobre la masa una capa de azúcar negra y sobre ésta la fruta cortada
en pequeñas rebanadas. Después se arrolla y corta en trozos de 300 g que se
ponen en latas, y una vez punteados, se cocinan (horno bajo). Cuando están
fríos se pintan con jalea poniendo a los costados granos de azúcar, almendra o
maní.
38. Pasteleria