En Rusia, este pan se llama kulich y es una
de las comidas tradicionales para las celebraciones de la Pascua ortodoxa,
aunque puede saborearse en cualquier ocasión. El pan deberá cortarse
horizontalmente en rebanadas delgadas para apreciarlo mejor. Sale 1 pan de 1
1/2 kg.
50 g de levadura fresca, 1 /4 cdita de
azúcar, 1 taza de leche tibia, 1/3 taza de pasas de uva, 3 cdas de ron, 6 tazas
de harina común de trigo, 2 1/4 tazas de azúcar impalpable, 1/2 cdita de sal, 1/2
cdita de esencia de vainilla, 9 yemas de huevo, 1 taza de manteca blanda, 1 /2
cdita de azafrán, 1 cdita de aceite, 1/2 taza de almendras tostadas y
fileteadas, 1/3 taza de cáscaras abrillantadas picadas, 3 cdas de manteca
Glaseado: 2 tazas
de azúcar impalpable, 3 cdas de agua fría, 1 cdita de jugo de
limón
Desmenuzar la levadura en un bol y unir a ella 1/4
de cdita de azúcar usando un tenedor. Agregar 1 cda de la leche tibia y
trabajar para formar una crema pastosa. Reservar el bol en lugar templado,
libre de corrientes de aire, durante 20’ o hasta que la preparación haya levado
y esté espumosa.
Poner las pasas y las cáscaras en un bol y cubrir con
el ron. Dejar descansar 15’.
Cernir la harina, el azúcar impalpable y la sal en
un bol grande, entibiado. Hacer un hueco en el centro y poner allí la leche
restante y la preparación de levadura. Trabajando con los dedos o con una
cuchara de madera incorporar gradualmente la harina al líquido. Mezclar hasta
terminar con toda la harina. Añadir entonces la esencia de vainilla y, una a
una, las yemas. Poco a poco, unir la manteca con la preparación.
Agregar el azafrán disuelto en 1 cda de agua
caliente y seguir mezclando hasta que los ingredientes estén bien unidos y se
haya obtenido una masa lisa.
Poner la masa del bol en una mesa enharinada y
amasar 10’. Estirar y amasar bien para que esté suave y elástica. Si la masa
estuviera pegajosa después de 8 a 10’ de amasar, agregar un poco de harina para
que resulte suave y no pegajosa.
Enjuagar, secar y untar ligeramente el bol grande
con el aceite.
Formar un bollo con la masa y ponerlo en el bol.
Tapar con una servilleta y dejar en lugar templado, libre de corrientes de
aire, durante 1 hora o hasta que la masa haya duplicado su volumen.
Si no se consiguen almendras tostadas, calentar el
horno a temperatura moderada, poner las almendras y tostarlas ligeramente hasta
que estén doradas. Echarlas en el bol donde están las pasas remojadas y las
cáscaras abrillantadas.
Untar ligeramente con 1 cda de manteca un molde
cilíndrico, de 15 cm de diámetro y 18 cm. de alto. Forrarlo con papel manteca
untado con el resto de la manteca. Dejar que sobresalga el papel de los bordes.
Apoyar el molde en una placa para horno.
Agregar a la masa las frutas remojadas. Amasar
suavemente para distribuir las frutas y almendras en forma pareja.
Calentar el horno a temperatura alta, 200° C.
Hacer nuevamente un bollo con la masa y ponerlo en
el molde. Tapar el molde con una servilleta y dejar en lugar templado, libre de
corrientes de aire, durante 30 min. o hasta que duplique su volumen.
Colocar en el horno la placa con el molde y cocinar
40’. Bajar la temperatura del horno a moderada, 180° C. y cocinar 1 hora más.
Retirar el pan del horno y dejarlo enfriar 10 min.
en el molde. Desmoldarlo en una rejilla y dejar que enfríe completamente.
Para el glaseado, cernir el azúcar impalpable en un
bol. Agregar el agua y el jugo de limón y mezclar bien formando una pasta.
Cubrir con el glaseado la parte superior del pan ya
frío y dejar caer por los costados. El glaseado deberá estar bien firme antes
de servir.